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Qué es Rebranding

RebrandingDefinición: 

El rebranding es una estrategia de marketing que implica la modificación de diversos elementos de una marca ya establecida, con el objetivo de cambiar la percepción que tienen de ella tanto clientes como inversores. Esta estrategia puede incluir cambios en el nombre, logotipo, tipografía, diseño, mensajes publicitarios o una combinación de estos elementos.

Es importante no confundir el rebranding con la creación de una marca nueva, ya que se trata de la evolución de una marca existente para adaptarse a un mercado en constante cambio. A lo largo del tiempo, es común que las marcas actualicen su identidad, desde ajustes sutiles hasta transformaciones profundas.

Cuándo es necesario un rebranding

Lo fundamental para una marca es el valor que esta tiene en el mercado. Si se está transmitiendo una que se considera que no es la correcta o la adecuada, es el momento de desarrollar una estrategia de rebranding:

  • El público ya no se identifica con la marca. Se encuentra vinculado al momento en que la empresa ya no es tan relevante como lo era antes. La audiencia no es estática y va evolucionando.
  • El objetivo cambia. La marca se puede encontrar  bien posicionada para un objetivo concreto. Sin embargo, si las tendencias en el mercado cambian, suponen que debe haber un cambio en la identidad y que este cambio se refleje en productos, en el propósito de la marca y la cultura de la misma.
  • La marca se encuentra en una fase de madurez. Las empresas también tienen un proceso. Tienen un inicio, donde se empieza a conocer la marca, crecen de forma exponencial y al final, de forma inventiva, llega el declive. Si nos encontramos en la última fase es cuando es necesario plantearse el rebranding.
  • Surgen nuevos mercados. Lo más seguro, es que si una marca decide abrirse a nuevos territorios, deba recurrir al cambio de marca para adaptarse a los nuevos mercados. Es imprescindible si queremos conectar con las nuevas audiencias.
  • La identidad de marca se ha quedado obsoleta. Uno de los errores más grandes es quedarse anclado en el pasado, por muy bien que haya funcionado. Las marcas deben mantener frescura y modernidad de forma constante.
  • Cambio comercial de la empresa. Se ha producido un cambio en la situación legal de la empresa (fusión, adquisición…)
  • Eliminar la mala imagen. La marca se ha visto afectada o está desarrollando acciones que dañan la imagen o percepción que los consumidores tienen sobre ella. El rebranding es una forma de evitar la muerte de la marca, a través de darle un aire nuevo a la misma.

Consejos sobre rebranding

  • Estudiar a la competencia: Es importante observar qué esta haciendo la competencia. Hay que mirar tanto el diseño como la imagen, la  tipografías y las estrategias que siguen para captar clientes. No es copiar lo que están haciendo otros sino observar las buenas ideas que están funcionando en el sector.
  • No tener miedo a probar: La idea es experimentar sin miedo a cometer errores. Fundamental para un rebranding es probar todo tipo de combinaciones hasta conseguir la que se considerar la mejor.
  • Escuchar a los clientes: Es imprescindible. El objetivo de cualquier marca es llegar al público objetivo, por eso es fundamental conocer sus ideas, lo que quieren y lo que no. Para ello es necesario atender sus peticiones, quejas y deseos.
  • Pedir opinión. Es importante recopilar cuanta más información mejor. Así se tendrá un mayor número de puntos de vistas distintos.  El error más grave es querer trabajar solo con un equipo reducido.

Beneficios del rebranding

Entre los beneficios del rebranding podemos citar los siguientes:

  • Renovación de la imagen de marca: Un rebranding puede actualizar la imagen de una marca, haciéndola más contemporánea y alineada con las tendencias actuales del mercado. Esto no solo atrae la atención de los consumidores, sino que también revitaliza el interés en la marca, tanto interna como externamente. Una imagen renovada puede dar lugar a nuevas oportunidades de negocio y colaboraciones.
  • Aumento del valor de marca: Al alinear la identidad de la marca con sus valores y misión, el rebranding puede aumentar su valor percibido. Esto refuerza la conexión emocional con los consumidores, quienes pueden ver a la marca como más auténtica y comprometida con sus principios. Un valor de marca más fuerte también puede traducirse en una mayor lealtad del cliente y precios premium.
  • Diferenciación competitiva: En mercados saturados, destacarse es fundamental. El rebranding puede ayudar a una marca a diferenciarse de sus competidores al ofrecer una propuesta de valor única y atractiva. Esto puede incluir una nueva estética visual, un mensaje de marca innovador o una experiencia de cliente mejorada que resuene más profundamente con el público objetivo.
  • Atracción de nuevos clientes: Un rebranding puede atraer a nuevos segmentos de clientes que antes no se identificaban con la marca. Al redefinir la identidad y el mensaje de la marca, es posible captar la atención de diferentes grupos demográficos o psicográficos, expandiendo así la base de consumidores y aumentando las oportunidades de crecimiento.
  • Mejora de la cultura interna: El proceso de rebranding no solo afecta la percepción externa de la marca, sino que también puede revitalizar la cultura interna de la empresa. Al involucrar a los empleados en el proceso de cambio y comunicar claramente la nueva visión, se puede aumentar la moral, el compromiso y la alineación con los objetivos empresariales.
  • Recuperación de la reputación: Si una marca ha sufrido daños en su reputación, el rebranding puede ser una estrategia efectiva para reconstruir la confianza y mejorar la percepción pública. Esto puede incluir el cambio de nombre, el rediseño del logotipo o la adopción de nuevos valores que reflejen un compromiso renovado con la calidad y la responsabilidad.
  • Adaptación a nuevos mercados: Cuando una marca decide expandirse a nuevos mercados geográficos o demográficos, el rebranding puede facilitar su aceptación y éxito. Adaptar la identidad de la marca para resonar con las culturas y preferencias locales es esencial para establecer una conexión significativa con las nuevas audiencias y asegurar una integración fluida.